En el tiempo que nos ha tocado vivir, aunque sospecho que ha ocurrido así antes, se está produciendo un total abandono de la búsqueda de la calidad, del camino correcto en todos los aspectos de la vida, y la actividad deportiva no iba a ser una excepción.
A diario veo escenas de personas realizando alguna actividad física que me hacen daño a los ojos y es obvio que ellas deben sufrir ese daño en sus propios cuerpos, pero es tan escaso su conocimiento de lo que están haciendo que ni se enteran, o lo que es peor, sienten ese daño como beneficioso.
Veo chicas con sobrepeso corriendo sin el nivel de fuerza, técnica y condición física previas adecuadas para no tener grave sufrimiento en su cuerpo y en su autoestima. Veo clases de spinning que más parecen una manada retorciéndose y resoplando al son de una música desquiciante, sin el mínimo conocimiento de la posición en la bicicleta, sin tener ni la más remota sospecha de que algo no va bien, y lo que es peor, sin la corrección del instructor, quizás porque ya es su enésima clase esa semana, clase que el centro en el que trabaja le obliga a ejecutar, cuando debería contratarle para dirigir y enseñar y no para sobreentrenarse. Veo chicos mover cargas enormes en ejercicios robóticos para deformar sus cuerpos a estándares de belleza que no se corresponde al de un humano naturalmente entrenado para el ejercicio físico y, como no logran parecerse al «Increible Hulk», entonces consumen productos peligrosos que son un factor desencadenante de muchas enfermedades. Veo…
En este artículo intentaré aportar algunas claves para aprovechar todos los beneficios de la actividad física y, al menos, no tener perjuicios. Aviso al lector que puedo golpear algunas de las creencias que se han arraigado con fuerza en nuestra sociedad.
Qué deberías saber sobre deporte y salud y nadie te ha contado
Primer principio: «El entrenamiento es para conservar la salud y alcanzar la plenitud natural en las capacidades innatas, no para perderlas»
Considero a las ciencias relacionadas con el entrenamiento, la actividad física y el deporte englobadas en el ámbito de las «Ciencias de la Salud». Por ello, de la misma forma que ocurre en la práctica de la medicina, en el entrenamiento físico también puede aplicarse el sistema de pensamiento de Hipócrates. Su «primum non nocere», primero no hacer daño, debería estar siempre presente como principio rector de todas nuestras acciones.
El pensamiento hipocrático se basa en la naturaleza y sus leyes. Si también las tenemos presentes al entrenar y enseñar las disciplinas deportivas que nos apasionan, lograremos:
- Alcanzar el mayor desarrollo posible de las capacidades humanas: físicas, mentales y morales.
- Hacerlo siempre de forma equilibrada, armónica y natural.
Segundo principio: «Cualquier disciplina o actividad física requiere un aprendizaje preciso»
En oriente utilizan cualquier actividad humana como vía de perfeccionamiento.Todo tiene una forma correcta, un camino correcto. En occidente también existieron y se utilizaron estos principios, aunque casi han caído en el olvido. Al menos debemos encontrar la forma correcta en todo lo que hacemos, para no hacerlas de cualquier manera. La forma correcta está muy cerca del camino correcto y avanzar por el camino correcto te permitirá cumplir el primer principio.
Tercer principio: «El ejercicio físico debe ser placentero, nunca una fuente de sufrimiento o frustración»
Sufrimiento no es lo mismo que fatiga. La fatiga es normal después de un trabajo bien hecho, realizado en la forma correcta. Un trabajo realizado en la forma correcta nos aportará sentimientos de regocijo y alegría, de plenitud y satisfacción. Varios motivos pueden causar que no tengamos esos sentimientos:
- No estamos practicando en la forma correcta.
- Entramos en competencia con compañeros de actividad de forma no correcta. La forma no correcta como ganadores nos lleva a la exaltación del ego. La forma no correcta como perdedores nos lleva a la frustración. Ambos casos nos llevarán al sobreentrenamiento, porque sólo puede ganar uno… y no tiene por qué ser el que más lo merece.
Lo importante es que no tener sentimientos de gozo con lo que haces te permitirá saber que no lo estás haciendo de la forma correcta.
Derrumbando falsos mitos:
1. Para perder el exceso de peso no es necesario aumentar la actividad física, basta con alimentarse de forma correcta.
Mucho se ha escrito sobre la alimentación correcta. Me limito a dejar la obra de referencia que en estos momentos sigo. Está escrita por una persona que ama las artes marciales desde niño, que ha dedicado su vida a la habilidad guerrera de curar aunando los métodos de la medicina occidental y oriental, que practica lo que predica y que lo ha demostrado llegando a una edad avanzada en perfecto estado de salud. Me refiero al Dr. Hiromi Shinya y su obra maestra: La Enzima Prodigiosa.
Espero haber aportado algo de luz en estas cuestiones sobre deporte y salud que debes saber y que nadie te había contado. Si las incorporas a tu forma de hacer las cosas seguro que te sentirás mucho mejor.
guillermo
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